Los miembros de Alcohólicos Anónimos comparten su experiencia con cualquiera que busque ayuda para su problema con la bebida; dan servicio persona a persona o “apadrinan” al alcohólico que llega a A.A. sea cual sea su procedencia. El programa de A.A., en el enunciado de nuestros Doce Pasos, ofrece al alcohólico una manera de desarrollar una vida satisfactoria sin alcohol.
El Anonimato
En Internet: Conforme con la forma larga de la Undécima Tradición, que dice, “No se deben publicar, filmar o difundir nuestros nombres o fotografías identificándonos como miembros de Alcohólicos Anónimos,” no se deben publicar fotos de miembros de A.A. que se puedan reconocer como tal en sitios del Web a los que miembros del público tienen libre acceso, incluidas las páginas sin restricción de las redes sociales.
Sea cual sea el medio, nadie que no sea el mismo miembro tiene el derecho de revelar su afiliación a A.A. Como dijo Bill W. en el número de enero de 1946 del Grapevine: “Debe ser el privilegio de cada miembro individual de Alcohólicos Anónimos abrigarse con tanto anonimato personal como desee. Sus compañeros de AA deben respetar sus deseos y ayudarle a guardar su anonimato en el grado que le parezca apropiado.”
Los comentarios son personales, alcohólicos anónimos ® y este blog no se hacen responsables de las opiniones aquí vertidas.
lunes, 24 de enero de 2011
LOS FINES DE SEMANA
Un rápido vistazo a los directorios, nos muestran que durante los fines de semana (sábados y domingos) el número de reuniones disminuye donde se hacen el número de miembros es significativamente bajo.
El chiste fácil es decir que durante esos días las recaídas, los malos momentos, la distorsión emocional, no se produce. Nada más lejos de la realidad, sabemos que en cualquier momento estas desagradables situaciones ocurren y que es precisamente los fines de semana cuando la tentación es más fuerte. Entonces; ¿por qué hay tan pocas reuniones durante esos dos días?
Creo que la respuesta es que Alcohólicos Anónimos funciona. Según avanza la recuperación nos integramos en la sociedad y dejamos estos días para estar con la familia, realizar actividades que la botella nos impedía practicar o gozar de la paz y la tranquilidad de estar con uno mismo.
El recién llegado no suele tener conocimientos o capacidad para encargarse de abrir el grupo y siempre depende de los más veteranos, estos que han hecho de la normalidad una forma de vida.
Sería bueno el plantearnos tener los grupos abiertos durante los fines de semana y que estas reuniones funcionaran a pleno rendimiento. Sé que es complicado pero por desearlo que no quede.
No obstante el grupo Catedral de Santiago de Compostela, tiene una reunión los sábados a las doce la mañana. Allí os estaremos esperando.
Felices 24 horas.